¿Te comerías un huevo añejado mil años? 😰
El huevo es un elemento gastronómico muy popular en la mayoría de los países, además es un alimento saludable lleno de proteínas y nutrientes ideales para un buen desayuno. En la mayor parte del mundo, el huevo es un alimento normal y muy utilizado en el desayuno, sin embargo, hay países un poco menos ortodoxos en cuanto a su preparación.
Uno de estos ejemplos es China, donde se consumen los famosos “huevos de mil años” que para las personas de occidente no suenan nada apetecibles, sin embargo, allá son todo un éxito culinario. De hecho, si algún día viajas a este país, puedes romper tus miedos y probar uno de estos famosos huevos.
Huevos milenarios
Una de las cosas que aportan a China un toque de misterio es el título de muchos de sus platos; un ejemplo de estos platillos con nombres extraños son los “huevos de mil años”. Estos huevos son un poco engañosos pues no llevan mil años añejándose, sino que, simplemente, son denominados así.
¿Qué son?
Se trata de una especie de huevos en conserva de pato o de gallina que son enterrados en una mezcla de sal, cal, arcilla y ceniza, junto a hierbas secas de planta de arroz que es regada por té durante un periodo de tiempo que varía desde semanas hasta meses.
Cuando se ha hecho la conserva, la yema adquiere un tono verde oscuro y la clara obtiene una textura gelatinosa en color marrón. En la actualidad, se sigue haciendo de esta manera tan tradicional, aunque también existen sistemas más modernos que incluyen productos químicos para que el proceso se acelere.
En el país asiático, los huevos de mil años son un alimento muy común y fácil de adquirir. Los puedes acompañar con arroz cocido, con carne de cerdo o añadiéndolos a una ensalada con un poco de tofu, aceite de sésamo, cilantro y una pizca de chile.
