Aquí te dejamos los pros y los contras 👇
Comer frutas y verduras crudas es muy común, de hecho, muy pocas personas se ponen a hervir un plátano o una manzana antes de comerlo. Además, es muy sabido que para aprovechar al máximo ciertos nutrientes es importante ingerir la comida en crudo.
A pesar de lo anterior, no es lo mismo la fruta o las verduras que la carne, por lo que muy difícilmente podemos imaginarnos comiendo carne cruda, sin embargo, actualmente es toda una tendencia.
¿Es bueno comer carne cruda?
Quienes prefieren alejar el fuego y la cocción de sus comidas defienden que la carne cruda es una fuente increíble y directa de agua, proteínas, grasas, vitaminas B1, B3, B6 y B12, así como A y E.
De igual forma, está comprobado que contiene cantidades importantes de hierro y zinc, así como aminoácidos libres. Por otro lado, cuando la carne se cocina, pierde una parte de sus nutrientes.
De acuerdo con Diego Castro, un cocinero argentino que durante años ha defendido la alimentación con base en carne cruda, ésta incluso ayuda a revertir el proceso de envejecimiento celular, mejora el funcionamiento de los sistemas inmunológico y digestivo, y es desintoxicante.
Lo malo de la carne cruda
Una de las razones más importantes para preparar la carne cocida es que esto facilita el proceso de digestión, lo cual es necesario pues el cuerpo humano no está preparado para procesos digestivos tan complicados.
Además, cocinarla siempre previene contra enfermedades relacionadas con la proliferación de bacterias, así como la conservación del estado óptimo de los alimentos.
Por lo tanto, al comer la carne cruda existe el risego de contraer E. coli, así como el protozzo Toxoplasma gondii, el Campylobacter, la Yersinia o la Salmonela. Todo esto, especialmente cuando se trata de aves y carnes rojas.