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El cáncer de mama es un problema muy serio pues tiene un alto índice de mortalidad en las mujeres, por lo que se recomienda que cada año se hagan estudios para combatir su aparición. Octubre es el mes de la sensibilización sobre el cáncer de mama, por ello hacemos esta nota para hacer mayor conciencia sobre este problema.
Esta enfermedad no tiene una cura absoluta, no hay forma de saber quién sobrevive y quién no lo hace, sin embargo, la forma en que nos alimentamos influye mucho en nuestra salud, por lo tanto, hay alimentos que contribuyen a reducir el riesgo de contraerlo.
Ajo
El Instituto Americano de Investigación del Cáncer, menciona que el ajo ayuda a disminuir la posibilidad de contraer cáncer de mama debido a sus compuestos como el azufre y varios fitoquímicos que ayudan a reparar el ADN e inhiben el crecimiento de tumores.
Frutos secos
Aportan, entre otras sustancias beneficiosas, ácido fólico y vitamina B6. Según un estudio publicado en el Journal of the National Cancer Institute, una dieta rica en estos nutrientes reduce las probabilidades de desarrollar cáncer de mama, sobre todo después de la menopausia.
Granada
Es muy rica en antioxidantes, que protegen a las células del daño de los radicales libres, y como los frutos rojos, también posee ácido elágico, que podría ayudar a impedir la proliferación de células tumorales estrógeno-dependientes.
Legumbres
Su consumo reduce la absorción intestinal de la glucosa y evita los picos de azúcar en sangre, lo cual es muy importante para prevenir el cáncer de mama, ya que cuando sube el nivel de glucosa en sangre se produce más insulina. La insulina estimula directamente el ovario, haciendo que fabrique más estrógenos, y se sabe que un nivel de estrógenos elevado aumenta el riesgo de cáncer de mama.
Huevo y lácteos
De acuerdo con el estudio ‘Breast Cancer: Basic’, realizado por investigadores de Jordania, cualquier alimento con vitamina D ayuda a disminuir el riesgo de contraer cáncer de seno, por lo tanto, el huevo, la leche, el queso, el yogurt y el aceite de hígado de bacalao son altamente recomendados.
Manzana
Según el Instituto Mario Negri de Milán (Italia), comer una manzana al día reduce un 18% la probabilidad de desarrollar cáncer de mama gracias a sus polifenoles. La manzana roja es la más rica en estas sustancias. Se recomienda lavarla bien y comerla con piel, ya que es donde se concentran la mayor parte de los polifenoles.
Berenjena
Contiene sustancias anticancerosas que parecen proteger a las células de las mutaciones que provoca el cáncer, por lo cual es muy recomendable consumirlas de forma regular.
Uvas
Gracias a su contenido en resveratrol, las uvas actúan como anticancerígenas y antioxidantes, dando como resultado el retraso del crecimiento de células cancerosas.
Granos integrales
Todos los granos integrales como el trigo, maíz, quinoa, avena, mijo, farro, entre otros; contienen altos niveles de fibra, los cuales ayudan a mejorar el tránsito intestinal, prevenir el sobrepeso y la obesidad. Estos dos factores contribuyen a la aparición de cáncer de mama.
Pimientos
Los pimientos son antioxidantes y protectores de las mucosas. También contienen capsicina, que bloquea los compuestos precancerosos que aparecen en la carne y pescados ahumados.