Comer en exceso daña más que desperdiciar comida 😮
El exceso de consumo de comida es la gran amenaza del futuro (no tan lejano) que está poniendo en riesgo al planeta (y a la salud). La paradoja es que las personas cada vez sienten la mayor necesidad de consumir y el mundo va a colapsar si no se reducen los niveles de consumismo.
La hambruna está aumentando, sin embargo, al mismo tiempo, hay zonas en el planeta donde el consumo en exceso es peor que el desperdicio, y mientras hay personas sobrealimentadas, otras mueren de hambre y el planeta sufre las consecuencias.
Según una reciente investigación, comer en exceso causa un mayor desperdicio que cuando se desperdicia la comida de forma directa. Los investigadores italianos propusieron medir el desperdicio global de alimentos basándose en el consumo excesivo, y resultó que el impacto ecológico es mucho mayor.
¿Por qué se desperdicia más al comer en exceso?
Para empezar, los investigadores estimaron el exceso de peso neto de la población de cada país, basándose en el índice de masa corporal (IMC) y la altura. Después, distribuyeron su contenido energético entre los grupos de alimentos de acuerdo con los alimentos que existen en el país.
El resultado de la investigación arrojó que el exceso de peso corporal corresponde a aproximadamente ¡140 mil millones de toneladas de desperdicio de alimentos en todo el mundo! Por otro lado, la cifra mundial de alimentos que se desperdician de forma directa es de mil 300 millones de toneladas.
Obviamente, el consumo desmoderado tiene impactos ecológicos muy fuertes. Las frutas, verduras, raíces y tubérculos tienen las mayores tasas de desperdicio directo, pero el consumo excesivo de energía se relaciona con alimentos más densos en calorías, los cuales implican más gasto de tierra, agua y gases de efecto invernadero.
La cantidad de CO2 que se genera por el excesivo consumo de alimentos en el mundo es de 240 mil millones de toneladas, lo cual equivale a la cantidad que la tierra liberó quemando combustibles fósiles en los últimos SIETE años.
Las zonas del mundo en donde más se consume en exceso son; la Unión Europea, América del Norte y Oceanía, pues entre las tres representan el 75 por ciento del consumismo en exceso. Además, según el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC), el consumo excesivo de productos de animales de granja en Occidente es probablemente el mayor contribuyente al cambio climático.