Hay héroes sin capa entre nosotros 🐾🙋♀🙋♂
Muchos de los animales que viven en las calles necesitan de nuestra ayuda, pero hay algunos casos en los que requieren inmediata asistencia.
Tortuga y perro
Las tortugas y los perros son mascotas maravillosas a los que se les tiene que dar suficiente espacio, especialmente si la tortuga es tan grande como el can. A un pastor alemán le gustaba descansar dentro del agujero enorme en la zona en construcción de la casa en la que vivía, en California, Estados Unidos. El hogar lo compartía con una tortuga de su mismo tamaño que le pareció buena idea acompañar a su peludo amigo en el agujero. Después de un rato, el perro quiso salir, pero la tortuga se lo impedía. Cuando la familia se dio cuenta, llamaron a los bomberos, quienes usaron un trozo de lechuga para hacer avanzar al reptil.
Búho
En Alicante, España, un búho quedó atrapado en el alambre de púas que dividía una propiedad. El ave fue vista por un cazador que alertó a personal del Servicio de Protección de la Naturaleza, que acudió a su rescate. La intervención fue muy oportuna porque el búho pudo morir de hambre, en el mejor de los casos, o fallecer después de una larga agonía por la muy probable mutilación de su ala. Lo mejor es que las autoridades ordenaron el retiro del alambre.
Caballo
Su motivo habrá tenido para saltar desde el acantilado al mar. Se trata de un potrillo que fue rescatado de morir ahogado en la localidad de Punta Saltacaballo, España. Personal de emergencias de la costa se dio cuenta de que el joven equino luchaba por su vida y acudió a salvarlo. En un principio remolcaron al potrillo a tierra firme, pero no podía trepar la filosa y resbalosa roca, así que lo subieron a la embarcación y lo llevaron hasta la playa.
Rata
¿Qué harías si te encuentras con una enorme rata? Seguramente tener asco, querer escapar o querer matarla. Pues en Bensheim, Alemania, se apiadaron de una que era tan grande que se atoró por uno de los agujeros de la alcantarilla por la que pretendía salir. El roedor fue visto por una niña que alertó a las autoridades de rescate de animales. El animal estaba tan atascado que tuvieron que llamar a los bomberos. En total 9 personas, de las cuales 8 correspondían a personal contra incendios, fueron necesarias para liberar a la rata.
Burro
Una policía en la localidad argentina de Rafael Castillo vio que un burro, muy débil y con las patas lastimadas, era forzado a jalar un carro, así que detuvo a los responsables y puso en custodia al animal. El asno no podía quedarse en este poblado, tenía que ser enviado al día siguiente, a Castellar, donde recibiría mejores atenciones. El traslado no podía esperar, pues la zona se caracteriza por el robo de ganado y los asaltos en general, de modo que esperar podría levantar sospechas sobre la procedencia del burro. De la situación fue alertada una rescatista de animales que se responsabilizó de él. Como no tenía el dinero suficiente para transportarlo y era cerca de la media noche, decidió escoltarlo hasta Castellar, un recorrido de 7 peligrosos kilómetros. Gracias a que se arriesgó, ahora el burro se está recuperando.