Tuvieron que imitar hasta la luz de la Luna para lograrlo 🌛
Muchos animales se encuentran en peligro de extinción por el abuso del ser humano. Cuando no destruimos su ecosistema, los cazamos para conseguir partes de sus cuerpos que consideramos preciadas, como pasa con las aletas de tiburón, el marfil de los elefantes y la carne de las ballenas.
Cuando el daño es casi irreversible, los expertos ponen en cautiverio a las especies y las ayudan a reproducirse. Ese es el caso del panda, el rinoceronte blanco, la tortuga marina, el mono araña, el zorro volador, el águila real, entre muchos otros animales. Sin embargo, aunque se han dado casos de éxito, es un objetivo bastante difícil de alcanzar.
Un ser vivo que está muriendo por la contaminación de su ecosistema y el cambio climático es el coral marino, especialmente el coral del Pilar del Atlántico, el cual se encuentra a punto de desaparecer. Para ayudarlo, la idea general es la misma: lograr su reproducción en cautiverio.
Sucede que son muy quisquillosos a la hora de procrear. No sólo el agua debe estar en condiciones, sino que el Sol y la Luna también deben intervenir. Pese a todo, científicos en Florida lo lograron. Para ello se basaron en un protocolo de intervención de corales diseñado en el Reino Unido, que les ayudó, primero, a imitar exactamente la alcalinidad y temperatura del agua, que varía de acuerdo a la época del año y la hora del día; después los atardeceres y las fases lunares, que estimula sexualmente a este maravilloso ser vivo. En el siguiente vídeo puedes ver cómo desovan.