Tras su increíble recuperación se convirtió en perro de terapia
El amor a la vida no pudo ser más fuerte en una perrita de Lebanon que sufrió un verdadero infierno antes de ser abandonada en la calle.
Maggie estaba atada, le faltaba una oreja y sus ojos lucían seriamente dañados. Sin mencionar que tenía muchas heridas de lo que parecían ser disparos.
El panorama resultó mucho peor cuando la organización de beneficencia para animales que la rescató hizo el primer diagnóstico. Le habían disparado 17 veces, tenía la mandíbula fracturada y estaba embarazada.
Pero no se rindió. Gracias a una campaña online , Maggie fue adoptada en Inglaterra. Poco después se hizo toda una celebridad de Instagram que visita a pacientes de hospitales como “perrita de terapia”.