Brujas, Bélgica y altos niveles de humor negro ¡Muy negro! 😁🌍
El director nominado al Oscar, Martin McDonagh nos trajó en el 2008 una de sus mejores cintas (con permiso de la grandiosa Tres Anuncios Por Un Crimen) la oscura, pero no menos hilarante, Escondidos En Brujas, protagonizada por Colin Farrell, Brendan Gleeson y Ralph Fiennes, un viaje lleno de humor negro e increíbles paisajes dignos del mejor de los tours europeos.
La película se ubica en la milenaria ciudad de Brujas, Bélgica, entregando una clara visión de la atmósfera única de las urbes con esta irreverente histórica. En primera instancia debemos destacar el tono eclesiástico que se encuentra presente durante todo el metraje. El asesinato por encargo que desencadena la trama principal, nos regala una muestra clara del aura que embarga a la denominada “ciudad medieval mejor conservada de Europa” ¿Que mejor carta de presentación que una de las tradicionales capillas?
A lo largo de la película somos parte de la innegable atmósfera medieval, el fascinante turismo y la imponente arquitectura de las calles
Es así que Ken (Brendan Gleeson) es la representación del turista esperado, el que se encuentra fascinado con todo lo que Brujas ofrece a sus visitantes. Por el otro lado Ray (Colin Farrell), representaría a todos aquellos que lo clásico e histórico de los sitios realmente no les interesa. Cabe mencionar que ambos se encuentran en la mítica ciudad por asuntos de trabajo más que por temas de placer, recordemos que son asesinos a sueldo esperando instrucciones de su jefe.
McDonagh hace un trabajo excelente de guion al combinar aspectos escabrosos como la muerte o la ética apoyándose del humor muy característico de su propuesta cinematográfica, misma que ha sido comparada con la de otros cineastas como Quentin Tarantino o los Coen. Perdidos En Brujas posee el equilibrio perfecto entre entretenimiento y estimulación visual, las locaciones en la ciudad belga son explotadas en su máximo nivel en cada uno de los planos abiertos, por lo que será inevitable no querer recorrer sus calles justo como nuestros personajes lo hacen a media noche.