Han cerrado los restaurantes y ahora no pueden alimentar a los caballos 😔
En muchas partes del mundo la cuarentena y el aislamiento siguen activos para evitar la propagación del coronavirus, lamentablemente, un efecto secundario del aislamiento es la falta de personas en lugares turísticos,
En México, quienes ofrecen paseos a caballo en La Marquesa, un parque nacional turístico cercano a Ciudad de México, se cuestionan si deben alimentar a sus animales o a sus familias.
“La gente ya está desesperada porque no tiene de dónde sacar el sustento para sus familias. Ahora dicen: ‘o come mi familia o comen los animales’”,
Bertha Mejía, representante de varios pobladores de San Pedro Atlapulco, una céntrica localidad donde el 80% de sus habitantes se dedica al turismo en La Marquesa.
Mejía habla con nostalgia de los servicios que se ofrecían en el boscoso parque en un típico día de esparcimiento: paseos a caballo, comida tradicional, tirolesas, juegos infantiles y renta de cuatrimotos.
Hasta antes de la llegada del virus, esas actividades y la convivencia con la naturaleza eran la forma en la que miles de habitantes de la capital y de la vecina ciudad de Toluca se distraían y tomaban un poco de aire fresco, dejando de paso una derrama económica importante.
“Todo está en ruinas, algo que era tan bonito, ahorita se está quedando en el abandono. Así está quedando nuestra Marquesa”, señala la mujer.
Reflejo de esa calamidad, Pedro Torres, de 52 años, tuvo que cerrar el restaurante que tiene en la zona y dejar pastando los caballos.
“Como negocios, pues la verdad nos ha afectado demasiado, creo que a un 100%”, dice. “No sabemos qué hacer, no sé a dónde acudir para que nuestra gente tenga por lo menos para comer”.
El desánimo en la población es cada vez más palpable pues esta localidad dependía casi en su totalidad del turismo.