La joven logró transformar las cáscaras de camarón en una envoltura bio-plástica 🦐
La idea de transformar las cáscaras de gambas en bioplástico surgió de la similitud que tiene con los plásticos convencionales; por lo que Angelina Arora de 17 años, inventó ‘Adelaide’ inspirándose en su cena. Además, este bioplástico se degrada por completo en 33 días.
Por su parte, el material es flexible, duradero, insoluble y transparente, lo que lo convierte en la alternativa perfecta para los envases plásticos de nueva generación.
Además, los exoesqueletos de camarón son ricos en nitrógeno, el ingrediente más importante en los fertilizantes de plantas, característica que los convierte en un material útil también para los agricultores, proporcionando a través de su degradación, el nitrógeno necesario para nutrir a las plantas.
Finalmente, este invento hizo poseedora a Angelina del Premio BHP de Ciencia e Ingeniería dentro de la Sociedad Australiana. La chica es estudiante de medicina y espera que a mediano plazo, el material se adapte también a usos médicos.