La pequeña no puede estar en lugares concurridos por eso decidieron ayudarla 🙌
Hay enfermedades que una vez que atacan a la persona, convierten su vida en una situación muy difícil, pues cada día que pasa es una lucha contra el cansancio, la falta de defensas, las agotadoras citas al hospital, entre muchas otras cosas.
Lamentablemente, en el mundo existen muchos pequeños con enfermedades fuertes que les impide disfrutar de sus cosas favoritas en la vida, por ejemplo, ir a comer a su restaurante favorito.
Esto le sucedió a una pequeña de tres años que enfermó de leucemia, y que tuvo que dejar de ir a su restaurante favorito porque no puede estar en lugares concurridos debido a su padecimiento.
Buenas obras
Afortunadamente, el restaurante J. Wilson, ubicado en Beaumont, Texas, entendió que tenía una deuda con una de sus clientes más fieles, por lo que abrió sus puertas fuera del horario normal, a las 8:45 horas (abre normalmente a las 10:00) para atender a Adelaide y su familia.
Adelaide Stanley
La pequeña de tres años ha tenido que enfrentarse a la leucemia desde hace un poco menos de un año y desde entonces ha estado sometida a un tratamiento de quimioterapia. Sin embargo, como sus defensas son muy bajas, un resfriado podría enviarla al hospital.
Debido a lo anterior, sus padres evitan a toda costa que asista a lugares concurridos pues existe el riesgo de que contraiga una enfermedad, Sin embargo, la pequeña, antes de enfermarse, amaba ir los domingos a comer al restaurante.
Adelaide pidió a su padre que la llevaran a comer y ante la negativa la pequeña no pudo ocultar su tristeza, por lo cual, su madre, se comunicó con una amiga que contactó a los dueños del lugar. El restaurante los recibió en un ambiente limpio, y no les cobró por el desayuno.