En Quito, Ecuador comen helado de cualquier cosa 😱
Hay personas que son buenísimas haciendo helado y que logran crear sabores insólitos, un ejemplo, María del Carmen Pilapaña hace helados de cualquier sabor: de mora, naranjilla, de catzo, de callampa (hongos) y hasta de cuy, el cual actualmente es el más conocido y es su especialidad.
Ella comenzó haciendo helados por necesidad, pues trabajaba en una empresa que quebró y posteriormente su hermano la acogió en su restaurante donde venden almuerzos, allí María del Carmen se hace cargo de la cocina, y aprovecha para comercializar sus helados.
La idea del helado de cuy se le ocurrió a partir de la feria del cuy, donde participó en talleres de manipulación de alimentos y otros temas. Con sus helados de sabores naturales (de fruta) participó en varias ferias, pero ella quería más.
Después de un mes de experimentos encontró la forma adecuada de prepararlo. Primero intentó con el cuero “machacado” sin muchos resultados; luego trató con el cuy asado y el sabor no era el esperado. Hasta que lo logró con la cocción de la carne entera en agua.
Para hacer el helado, debes dejar el agua hervir por lo menos dos horas, hasta que se reduzca el líquido “a unos 15 mililitros”, luego hay que esperar a que se enfríe para poderlo licuar y que quede como un paté.
Al cuy licuado lo mezcla con una fruta, esto fue parte del experimento que hizo, ya que no con todas resulta bien, pero descubrió que, con la naranjilla o el maracuyá, también cocido, el sabor queda en su punto.
El resto del proceso es como preparar un helado “normal”, batir la crema de leche, incrementar el puré del cuy con el de la fruta y agregar la leche condensada. Luego de un día de permanecer en el congelador está listo para servir.
Este extraño manjar lo puedes servir con salsa de maní y lo expende en el local donde labora, que se ubica en la Autopista General Rumiñahui, entre el puente 5 y puente 6 (retorno a Quito).