¡La comida más importante del día no debe inflamarte! 😋
El desayuno es sumamente importante y siempre debe cumplir la función de nutrir nuestro cuerpo y darnos la energía necesaria para empezar con nuestras actividades diarias.
Aprovechar al máximo los primeros alimentos del día significa elegir los alimentos que despertarán nuestros sistemas y proporcionarán la energía que necesitamos para estar concentrados y activos.
Un desayuno saludable contiene proteínas, frutas, granos enteros o verduras. Los tamaños de las porciones dependerán de su edad, actividad y objetivos de dieta, pero como guía general, tu plato debe consistir en alrededor de 25 por ciento de proteínas, 25 por ciento de carbohidratos y 50 por ciento de frutas y/o verduras.
Omelette de vegetales
Los huevos son ricos en proteínas, vitaminas y minerales como el selenio y B-12 que son muy bajos en calorías. Agregar algunas verduras, como espinacas, pimientos y champiñones, a tu omelette solo aumenta el contenido nutricional y agrega un sabor increíble a tus huevos.
Avena con moras
No todos los carbohidratos son malos, evita los carbohidratos refinados, como los panecillos y busca los granos enteros. Los carbohidratos sin refinar, como la avena, que proporciona fibra, proteínas y vitaminas B. Agrega un puño de arándanos para un potente poder antioxidante.
Yogurt griego con frutas y nueces
El yogur griego proporciona proteínas y probióticos antiinflamatorios que brindan una mejor salud intestinal. Cubre tu tazón con frutas ricas en vitaminas como las moras, que son altas en antioxidantes, y una variedad de nueces como las almendras y las nueces que contienen ácidos grasos omega-3 saludables.
