Logró ser rey después de bajar 100 kilos 😰
Muchas personas siempre están al pendiente de la última dieta de moda, si eres de esas personas seguro ya hiciste o escuchaste de la dieta keto, la dieta paleo o la dieta mediterránea. Lo que casi nadie sabe es el origen de las dietas.
¿Quién fue la primera persona en ponerse a dieta?
Durante la Edad Media, alrededor del año 958, el rey Sancho I de León, apodado “El Craso” o “El Gordo” sufría de un problema de sobrepeso severo, llegando a pesar 240 kilos. Después de dos años de reinado fue destronado pues su gordura le impedía llevar a cabo las funciones de un rey.
Su historia
Como siempre fue un noble muy importante, jamás tuvo la necesidad de moverse para realizar ninguna actividad, por otro lado, todo el tiempo vivió rodeado de grandes festines y banquetes envidiables, lo cual le causó una obesidad monstruosa. Para colmo, en la España cristiana de la época en la que él era rey, la alimentación era sobria por razones de escasez.
Su alimentación diaria consistía en 17 platillos y, una buena parte de ellos, elaborados con carne de caza. Llevaba una dieta de miles y miles de calorías, lo cual causó desacreditación en su mandato y lo hizo perder el trono.
Después de haber sido destronado por su tío, el monarca solicitó a un médico de Córdoba llamado Abderramán III que le ayudaría a perder peso y recuperar su trono. Él decidió ayudarlo, pero como su caso era muy severo su tratamiento también lo fue.
Su dieta
Si para las personas normales estar a dieta significa casi una tortura, para el rey Sancho la tortura si fue real, según cuentan las crónicas, uno de los médicos más famosos del líder musulmán le cosió la boca, le encerró, le impidió probar bocado durante 40 días y tan solo le dio de beber unas infusiones para que no se deshidratara.
Las infusiones que tomaba por medio del pequeño espacio que dejaron en su boca cosida eran de agua salada, agua de azahar y agua hervida con verduras o jugos de frutas. A medida que adelgazaba, sus flácidas carnes recuperaban su firmeza a base de largos masajes y extenuantes baños de vapor.
Al final, a pesar de lo doloroso que resultó el proceso, a los 40 días había logrado bajar de peso considerablemente, por lo cual ya podía tener mayor movilidad, por lo tanto, en cuanto realizó su propósito, fue a recuperar su reino y gobernó hasta su muerte en el 966.