Pequeños cambios con grandes consecuencias 😉
Sin las abejas, la vida como la conocemos no existiría, pero ¿Realmente estamos haciendo algo para ayudarlas? En Holanda sí y de una manera muy original.
En la ciudad de Utrech decidieron darles un toque verde a todas las paradas de autobús para fomentar la polinización. Colocaron pasto y flores en los techos, y dejaron que la naturaleza hiciera el resto.
Las abejitas no tardaron en acercarse y desde que se implementó la iniciativa la ciudad luce mucho más colorida. Lo que es más agradable es que muchos vecinos participaron en la construcción de estas ‘paradas de abejas’, que actualmente es de los pocos lugares donde ellas pueden habitar.