Cuando se trata de sobrevivir, los habitantes de estas naciones son superhéroes
Ningún lugar está a salvo de nuestros residuos, pero hay ciudades en las que el sólo hecho de existir pone aprueba la resistencia del cuerpo humano.
México
¿Te gusta fumar? En la Ciudad de México lo puedes hacer sin necesidad de encender un cigarro. Es gracias a la contaminación del aire que respiramos el humo de 5 cigarrillos todos los días. Pero si esto te preocupa, imagínate que ya no puedes vivir en tu casa por todos los residuos químicos que han echado a tu comunidad. Así ocurrió en Hidalgo, donde una localidad fue desalojada debido a un cóctel mortal de mercurio, arsénico, plomo y bario detectado en la presa Endhó.
Rusia
La radiación puede afectar tu cuerpo en cuestión de minutos ☢ Aunque depende de qué tanta exposición tengas, experimentarás fatiga, vómito, diarrea, antes de entrar en coma y morir 💀 Por eso a los europeos les preocupa tanto la contaminación nuclear en Rusia que se concentra en los montes Urales. Sin mencionar que en esta nación la contaminación por químicos no es tan inusual: en Pervouralsk una fábrica de cromo derramó desechos que tiñeron de verde la vialidades, mientras que en Kuznetsk una empresa de carbón hizo negra a la nieve.
Afganistán
Sólo vivir aquí reduce tu expectativa de vida a casi la mitad, pero para los niños el panorama es mucho peor. Sucede que la falta de agua potable mata más infantes que la posibilidad de que una bala los alcance 🚰🚫 Los ríos de la región están mortalmente contaminados por químicos y fosas sépticas.
India
Literalmente te puedes morir intoxicado en la India a consecuencia de la polución. En las principales ciudades, las grandes industrias contaminan tanto el aire que sus habitantes fuman involuntariamente el equivalente a 45 cigarros al día 🚬 Y la zona rural no se salva. Si tenías ganas de visitar el río Ganges debes saber que está lleno de excremento, residuos sólidos y hasta cadáveres humanos ☠
China
Si lo tuyo son los lugares concurridos y si odias el sol, China es para ti. En Linfen todos los días mueren más de 4 mil personas bajo una densa capa de aire sucio que no deja pasar la luz solar. Mientras que los ríos de este país son usados como vertederos. El río Jianhe, por ejemplo, es rojo como la sangre, a consecuencia de los químicos industriales que le arrojan.